El presidente de la Federación Andaluza de Municipios y Provincias (FAMP) y de la Diputación de Sevilla, Fernando Rodríguez Villalobos; y el presidente de la Asociación de Gestores de Residuos del Sur (AGRESUR), Rubén Barreno Martínez, han suscrito este pasado jueves un protocolo marco de colaboración entre ambas instituciones. Con la formalización de este protocolo, la FAMP continua con su política de establecer alianzas con otras organizaciones, ampliando así su campo de actuación para visibilizar el municipalismo andaluz y destacar el importante papel que tienen los Gobiernos locales de Andalucía como actores clave de fomento y desarrollo de todo tipo de acciones.
“Tanto la FAMP como AGRESUR coinciden en que la lucha por el cambio climático, su efecto sobre la biodiversidad y la creciente escasez de recursos, si bien exigen soluciones globales, deben desarrollarse bajando al territorio y considerando la agenda local, lo que requiere de acciones efectivas en las ciudades y pueblos de Andalucía, en línea con el desarrollo sostenible y la economía circular”
Rodríguez Villalobos ha subrayado que “la firma de este protocolo nos permite potenciar las políticas públicas en esta materia, especialmente en actividades de formación e información de responsables locales, en beneficio de la ciudadanía, generando un entorno de cooperación, intercambio de experiencias y colaboración entre las partes”.
En este sentido, ha abundado que “el objeto del protocolo suscrito es el establecimiento de un marco de colaboración institucional entre ambas organizaciones para el desarrollo de actuaciones tendentes a contribuir a un mayor desarrollo de la conciencia ambiental respecto a la gestión de residuos, promoviendo un modelo de gestión sectorial basado en la Economía Circular, y fomentando foros de encuentro y de difusión entre nuestras entidades asociadas y operadores y ciudadanía”.
El presidente de la FAMP ha enumerado algunos de los objetivos concretos que se plantean mediante el Protocolo formalizado destacando entre otros “la promoción de un desarrollo sostenible; resaltar el importante papel de los Gobiernos Locales en este campo; fomentar la efectiva aplicación de los principios de co-gobernanza y colaboración administrativa; contribuir al desarrollo de estrategias locales en favor de los ODS y promover campañas conjuntas de información, concienciación y sensibilización ambiental”.
En este protocolo también han quedado fijados los ejes de intervención mediante actuaciones que serán planificadas y acordadas previamente por las partes y, en su caso, por los Gobiernos Locales interesados. Entre otras actuaciones a desarrollar, Rodríguez Villalobos ha apuntado “la creación de foros técnicos de trabajo; la promoción de acciones de formación a responsables locales y la implantación de mejoras en dispositivos de inspección, control y policía ambiental y difusión de buenas prácticas de gestión en el sector”.
En cuanto a la concreción de actividades a desarrollar se verificarán mediante adenda o convenio específico entre las partes, que establecerán las actividades, programas, proyectos o iniciativas que hayan sido valoradas previamente por la comisión de Seguimiento.
Finalmente, el presidente de la FAMP se ha mostrado convencido de que “este protocolo será una buena herramienta para luchar conjuntamente contra el cambio climático, fomentar el mayor respeto posible hacia el medio ambiente y el desarrollo sostenible, potenciar la economía circular desde un enfoque integrado y la puesta en valor de los gestores de residuos”.
Por su parte, el presidente de AGRESUR, Rubén Barreno Martínez, ha agradecido a la FAMP la oportunidad de firmar este acuerdo entre ambas entidades, “que va a redundar en una mayor coherencia en las prácticas de gestión de residuos en general y en la búsqueda de altas cotas de circularidad”.
Barreno Martínez ha subrayado que establecer un marco de relaciones con la FAMP “puede agilizar y favorecer la colaboración entre las empresas de nuestro sector y los municipios andaluces, facilitando soluciones ya preestablecidas que hagan más fácil la gestión municipal de estos residuos generando, además, empleo, valor y riqueza”. Ha finalizado destacando “la necesaria colaboración público-privada, para alcanzar los objetivos de sostenibilidad y circularidad que se persiguen, así como contribuir a lograr el deseado objetivo de cero residuos a vertedero en Andalucía”.